viernes, 27 de febrero de 2009

Semana de receso!

Este es un segundo anuncio a los amables blogleyentes... Dirán que no acabo de regresar cuando ya me quiero ir, pero que le vamo' hace' si se presenta la maravillosa semana de receso la próxima semana y por ende nos vamos de nuevo de paseoooo!!! Así que las actividades blogísticas estarán suspendidas hasta nuevo aviso.

Debo hacer un pequeño corte comercial, para darle crédito a Ryanair y Wizzair, patrocinadores del evento que se aproxima. Sin ellos, nada de esto hubiera sido posible.

Y es que, ¿cómo no aprovechar encontrar un vuelo a Riga por 5 €? Imposible no.. Y una vez en Riga, pues ¿algo más no? Porque son ciudades tan pequeñas 5 días son demasiados para estar ahí y hay que aprovechar para conocer más! El plan inicial fue ir a Riga porque escuchamos (Adriana, mi compañera de trayecto en esta ocasión y yo) que había vuelos baratísimos. Y de hecho sí, 5 €, que al final se convierten en 15 € por los impuestos y porque no somos ciudadanas de la UE. De todas maneras 15 € para un vuelo internacional, es regalado. (Ojalá eso costara ir de Bogotá a México, no?).

Recuerdo que eran como las 11 pm cuando empezamos a planear el viaje hace 3 semanas y terminamos como a las 5 am enloquecidas con los precios tan bajos y queriendo recorrer Europa en una semana... Pero nos contuvimos las ganas y sólo seleccionamos un par de destinos más para nuestra aventura.

Pues bueno, les cuento mi itinerario... Salimos mañana temprano en bus a Tampere, una ciudad a 3 horas al norte de Helsinki. Estaremos todo el día ahí y en la noche tomaremos el vuelo a Riga, la capital de Letonia, uno de los países bálticos. Ahí estaremos la noche del sábado y todo el domingo, porque el lunes temprano, sale nuestro avión para Varsovia, capital de Polonia, claro que para llegar allí, antes tendremos que pasar por el aeropuerto de Estocolmo, Suecia. No sabría decirles por qué, pero ésta era la ruta más indirecta pero más barata, así que ahí estamos. Por recomendaciones de gente polaca que esta aquí, no nos quedaremos en Varsovia más que la tarde, en la noche tomaremos un tren para ir a Cracovia, la antigua capital polaca. Esa ciudad si está súper recomendadísima, así que estaremos 2 días. Bueno, del segundo será parte porque haremos una visita al "famoso" campo de concentración nazi llamado Auschwitz y a unas minas de sal que curiosamente, también tienen catedral, la otra única en el mundo, segunda después de la de Zipaquirá.

El 4 en la noche atravesaremos casi de un lado a otro Polonia para llegar al norte a una ciudad, puerto sobre el Báltico llamada Gdansk. Al principio nada más iríamos ahí por cuestiones técnicas, básicamente para tomar el avión de regreso a Turku que está a 3 horas de Helsinki. Pero resultó ser que también es muy bonita y turística, así que estaremos un día visitándola. Finalmente, como lo mencioné, el viernes 6 volaremos a Turku y ahí aún no hemos definido si pasaremos la noche para conocer al día siguiente la ciudad, o nos regresaremos directamente a Helsinki. Todo depende de que consigamos alojamiento barato, y eso en Finlandia es imposible. Mientras en Cracovia pagaremos sólo como 3.50 € por noche en el Hostal, aquí en Finlandia los más baraticos no bajan de 15 €... Juzguen ustedes si es que no está caro este país.

Bueno, pues con esto los dejo por una semana.

Besos y abrazos!

Moi moi

Laskiainen

Les cuento que esta semana estuvo medio muerta la escritura porque tenía que ponerme al día con la tesis y mandar la primera entrega del semestre. Sí, aunque no lo crean, también estudio.. Jajaja..

Pero bueno, el martes en medio de todo me dí una escapadita para participar de un evento estudiantil muy tradicional en esta ciudad, algo llamado Laskiainen. Estuvo muy divertido y congelador, pero chévre porque es bien tradicional. Además almoramos como casi siempre en la universidad y vimos que la celebración empezaba con un delicioso postre típico de ese día.

Laskianen en cristiano significa "carnaval" y en particular, el martes de carnaval, que en este año fue el pasado 24 de Febrero, es el martes que precede al miércoles de céniza, día que marca el inicio de la Cuaresma. Entonces como empieza esta época de ayuno y meditación, pues las familias finlandesas y en particular los estudiantes, se reúnen a celebrar, a comer, por supuesto a beber -que es lo que más les gusta-, y, como se trata de tradiciones locales, pues por qué no, a deslizarse en trineos de plástico colina nevada abajo... después de todo, estamos en Finlandia.

El evento daba inicio a las 12 del día y oficialmente terminaría a las 4pm, pero extraoficialmente se supone que, al menos para las celebraciones estudiantiles, no tiene hora para acabar. El lugar en donde se celebra es un parque al sur de la ciudad llamado Ullanlinna. La particularidad de este sitio, razón por la cual lo hacen ahí, es que tiene una pequeña colinita que garantiza 100% de adrenalina pura al lanzarse desde ahí en un trineito.

Una particularidad de ese día, en mi opinión lo que más vale la pena ver, es el colorido de la vestimenta de todos los estudiantes. Resulta que cada facultad, de cada universidad tiene un color distintivo, por ejemplo ciencias sociales es rojo, ciencias puras amarillo, leyes morado, ingeniería blanco, etc. El color los representa y está tan interiorizado, que hasta lo visten. Cada facultad tiene como un traje típico, un overol, con el color que los identifica y este es el día más especial para lucirlo. Además, cual capas de tuna/estudiantina, cada estudiante personaliza su overol poniendole toda clase de estampas, parches, llaveros, etc. Entonces el panorama al llegar al lugar fue bastante agradable y divertido, sobre todo por los overoles rosados, los verde limón y en general la mezcla de todos juntos. Además nos recibieron con una taza de kakkao/chocolate caliente, que para el frío que hacía, no había más que agradecerlo.

Yo la verdad no le quise invertir al overol porque como todo, cuesta un montón, pero no me quedé con las ganas de uniformarme porque me conseguí uno prestado. Marjo-Ritta, una chica finlandesa con la que estoy llevando un curso de intercambio de lenguajes (español-finés-inglés, después les contaré de esto, se llama Alice Course o curso Tándem), casualmente también está en la Fac. de Ciencias Sociales y me prestó el suyo.

Además, se me olvidaba mencionar, verán en la foto que una pierna tiene un pedazo de overol blanco. Esto significa algo. La gente se intercambia partes del overol con sus novios, amigos y así. En este caso, el novio de Marjo-Ritta estudia ingeniería y su overol es blanco.

Otra cosa super interesante es que hacen un concurso de trineos: premian al más creativo, que se deslice más rápido y con mayor número de gente. Y la gente se ve que le echa ganas porque había unas cosas hechas hasta en madera! Vacas, juegos de twister, sofás, gente en bata y gorro de baño, en fin. Hay gente bien loca aquí.

Y lo que nunca puede faltar en un evento finlandés, tomando. Yo creo que no tienen de otra con el frío que hace, pero eh Ave María si que toman estos! Mi solución pal frío antes que embriagarme, fue irme pa la casita tan pronto como ya no aguanté más y había visto todo. Además porque el concepto "seguridad" desaparecía vertiginosamente... Tras cada trago que ingerían los asistentes, el asunto de deslizarse por una colina nevada a toda y sin dirección se hacía un poco más peligroso y la verdad aún no quiero tener que estrenar mi seguro médico. Mejor si se queda sin usar!
Un videito más:

jueves, 19 de febrero de 2009

Lappi: 30 grados bajo cero (III parte)

Como todo lo bueno tiene su final... llegó el tan -no- esperado último día. Sin embargo el tren hacia Helsinki partía a las 6pm, así que hubo tiempo de ir a hacerle la visitica a Santa Claus! Además había que tomarse la foto en la línea del círculo polar ártico y pues como a este señor le dio por construir su casa justo ahí, ni modo, tenía que dejarnos pasar!!

El lugar esta bonito pero me lo imaginaba como súper diferente, no vi ningún duende verde ayudando a hacer juguetes! Eso sí, hice dos descubrimientos: Primero, descubrí de donde saca dinero Santa Claus para repartir regalos en cada navidad.... Lo saca de todo lo que uno se gasta comprando pendejada y media en la famosísima "Villa de Santa Claus" o sea ahí. En realidad, es un lugar destinado única y exclusivamente a gastar plata, recuerditos, muñequitos.. Y claro, como no hacerlo, si uno piensa "oh, estoy en el polo norte, nunca más voy a venir aquí, tengo que aprovechar"... Jajaja! Yo no fui la excepción y sucumbí en la turistiada total que en mi caso consistió en comprar el peluche de Rudolf en la "Oficina de Santa Claus". Segundo, descubrí porqué a nosotros (hablando de latinoamerica Colombia y México para el caso) no nos trae los regalos específicamente Papa Noel, sino el Niño Dios o los Reyes Magos... Porque no sabe donde queda!!! Como pueden ver en la foto de sus señales, lo más cercano a nosotros que conoce es Nueva York, de resto sólo reparte regalos en Europa y Asia casi casi...

Hasta la foto con el don de barba blanca cuesta y uno no la puede tomar con su módica camarita... Bueno, pero vale la pena, después de todo, no todos los días se conoce a Santa Claus (de nuevo, que bien funciona la mercadotecnia). Al principio estabamos un poco consternados porque sólo pasaríamos 2 horas en la casa de Santa, de las cuáles 40 min. son en la fila para la foto con el don. Pero después caimos en cuenta que tal vez es a propósito, porque una media hora más ahí, y uno se declara en quiebra...

Después de la villa y de lo poco gratis, la foto en la línea del círculo polar ártico, nos fuimos a Rovaniemi, nuestro destino de llegada y de partida. Teníamos unas 4 horas para caminar por la ciudad y almorzar así que en medio de los -16°C con cara de -40°C, hicimos un pequeño recorrido por la blanca Rovaniemi. Está bien bonito el lugar, pero de verdad que qué valor tienen los 58.000 habitantes de tan congelada ciudad para vivir ahí con semejante frío. Hasta los carros los tienen que dejar conectados a una batería que los mantiene calientes en los parqueaderos al aire libre para que las puertas no se congelen y luego no se puedan abrir!!!
Creo que las imágenes hablan por sí solas!

Y bueno... Así terminó la aventura nórdica, con pestañas congeladas, sin auroras boreales, con unos kilos demás, un miembro más en la familia, con momentos que no se pueden olvidar y con ganas de repetir!
Videito:

Lappi: 30 grados bajo cero (II parte)

Tocó dividir en tres partes el relato para que no se me aburran leyendo y para poder poner más foticos... son demasiadas... Jajaja

El segundo día teníamos varias opciones de actividades. Empezamos haciendo una caminata por el lago y los boscosos y nevados alrededores con "zapatos para caminar en nieve", una especie de raquetas que no dejan que uno se súper hunda en la nieve... Teníamos unos 70 cm de nieve y con las raquetas uno se hundía como unos 20 cm nada más. Al principio sentíamos que no servían para nada, pero en la mitad de la nada me dio por quitarmelos para una foto y cuando me vi enterrada en nieve hasta las rodillas me di cuenta que en realidad sí servían... Atravezamos todo el lago y visitamos "la casa del lago", que en invierno no la tienen funcionando pero en verano debe ser muy lindo estar ahí! En la tarde hicimos cross country ski también sobre el lago... Es muy útil tener un lago ahí, es un centro natural de entretenimiento en cualquier época del año!
Después de todo, como si no estuvieramos lo suficientemente cansados, regresamos de nuevo a la infancia para deslizarnos en los trineos por la montañita de nieve, esta vez con empujoncitos de los mellizos hijos de los dueños del lugar... De nuevo reitero que los niños aquí son hermosos! Se ven súper tiernos en los trajes y overoles de invierno, además, ellos en particular, bien inteligentes y hasta bilingües! Tienen 7 años y hablan mejor inglés que yo...
La cena de esa noche fue un delicioso salmón adivinen con que? Adivinaron.. con papa! Pero esta era en tiritas y con queso gratinado... otro platillo típico de por aquí... Y las bayas donde quedaron? Ahora estaban en el postre! Bayas de arándano con crema! La rutina noctura fue igual a la del primer día... sauna, agua helada, sauna, nieve, sauna... Nada más que ese día casi me quedo sin pierna derecha tratando de salir rápidamente del agua helada... Jaja, no mentiras, no tanto pero si quedaron llenas de moretones y raspadas porque el hielo corta, en una de esas saliendo del agua medio me resbalé y tenga sumercé la pierna rapadita! Pero no importa, insisto en que el sauna es sinónimo de calidad de vida y después de un agotador día en la nieve, la relajante sesión de sauna lo deja a uno listo para soñar con los angelitos!

Lo mejor de ir a dormir, fue poder despertar al día siguiente y ver que la mañana nos tenía una sorpresa: Salió el SOL! El tercer día tuvimos un sol espectacular y un cielo azul hermoso! Todo se ve más bonito con el sol, los colores se iluminan, la nieve parece escarcha y brilla, la gente sonríe, la vida se alegra! Perooo el frío aumenta. Eso es regla, ya lo aprendí aquí en el tiempo que llevo, el hecho de que haga sol significa que hará más frío de lo normal. Esta más que comprobado! Ese día estuvimos en un el Parque Nacional de Pyhä, unos 60 Km más al norte de donde nos encontrabamos. El paisaje, que aunque no difería mucho del que teníamos en Korvalan, se multiplicaba cien veces en tamaño y se iluminaba con el sol para parecer el bosque en el que Blanca Nieves se perdió. Nosotros parecíamos más bien los 7 enanitos (o los 20 enanitos) caminando en fila india para no salirnos del sendero de caminata porque un paso fuera de el implicaba ser desenterrado de casi un metro de nieve...
En algún momento de la caminata, teníamos que bajar la montaña, para lo cual en el parque muy inteligentemente construyeron unas escaleras, escaleras que en esta época invernal están completamente cubiertas de nieve y como resultado tenemos a todo el mundo tirándose por, prácticamente, un tobogán de nieve. Afortunadamente yo la libré sin revolcón, pero al menos tres de mis compañeras de travesía, bajaron rodando y dando botes montaña abajo por 3 pendientes como de 90 grados... Divertido verlo desde abajo, pero no estar en su lugar. Nadie quería terminar en el hospital! En ese momento entendí porque los seguros médicos para venir a Finalandia son más caros que para cualquier otra parte de Europa (lo normal es una cobertura de $30.000 € y aquí exigen $100.000 €). Gracias a Dios no pasó nada, porque por más caro seguro que uno tenga, quien sabe donde estará el hospital más cercano y no creo que esté muy cerca de la nada.
Lo más chistoso es que una vez todaas logramos bajar, nos encontramos otro grupo que había salido unos minutos antes a la caminata y venía de regreso porque les habían informado que el lugar a donde queríamos ir, un mirador del parque, quedaba más lejos de lo que pensabamos, así que dimos media vuelta y ahora había que escalar la montaña por la que nos acababamos de tirar (eran originalmente 3 secciones de escaleras de unos 35 escalones cada una). Ahí si que estuvo peor, pero bueno, lo logramos sin saldos ni bajas.

El trayecto de regreso a Korvalan estuvo acompañado por un atardecer increíbleeeemente hermoso. Las fotos desde adentro del bus desafortunadamente no son las mejores, pero los colores anaranjados del horizonte en contraste con el verde y blanco de los pinos y el azul claro del cielo eran maravillosos. Al ver ese atardecer, en general en un viaje como este, de verdad que uno se siente inmensamente bendecido, afortunado...
En la noche teníamos la cena más esperada del paseo, probaríamos la carne de reno! Ese día pensando y oyendo comentarios mios y de mis compañeros, decidí pensar que las vacas, los pollos, los peces y los cerdos son definitivamente muy feos en la vida. Pobres porque nadie los quiere, al menos a nadie le pesa comérselos. Lo digo porque aunque había emoción por probar el reno, también había conmoción por el mismo hecho. Esperábamos que no nos estuvieramos comiendo una pata de los lindos animalitos que un par de días atrás nos habían dado una vuelta en trineo... O peor aún, que no nos estuvieramos comiendo a Rudolf! Jajaja. El caso es que está rico, pero nada muy lejano a la carne de vaca. Un sabor un poco más fuerte, es más grasoso pero creo que estaba bien preparado y no tenía mucha grasa, acompañada de...... sí, sí, puré de papa y bayas de arándano rojo! Así es como se come. Lo mejor mejor mejor, fue el postre de esa noche... muy típico de Laponia: queso de Laponia (como una cuajada sin sabor y cauchosa) asado en leche con mermelada de "baya de nube" (cloudberry)... Sin comentarios, simplemente exquisito.
Con tal sol durante el día y el cielo completamente estrellado que pudimos observar al anocher, no quedaba más que esperar poder ver otro fantástico espectáculo de auroras boreales en la noche... A eso hay que sumarle que la temperatura que marcaba el termómetro al salir del restaurante era -27°C !!! A media noche, tuvimos la máxima de -30°C... Sin embargo, triste muy tristisimamente, doña aurora boreal no se dejó ver. Como a las 2:30 am el cielo se había nublado y las esperanzas de verla se fueron frustradas a dormir conmigo...
Lo bueno en medio de lo triste del asunto es que así tengo un motivo más para regresar a este hermoso lugar algún día en la vida.
Videítos:

miércoles, 18 de febrero de 2009

Lappi: 30 grados bajo cero (I parte)

Bueno, pues aquí estoy de regreso con la crónica!!!

Lappi, Lapland, Laponia... selva blanca y profunda en todos los sentidos: profunda la nieve, profundo el horizonte, inmensos árboles, profundo el frío, profunda la emoción de estar en el Polo Norte por primera vez en la vida. Estar ahí es algo que uno siendo tan tropical en la vida, jamás se imaginó, al menos yo, no me lo iamginé. Pero ahí estuvimos, 4 días que les trataré de resumir con lo mejor de lo mejor, porque definitivamente hay cosas que los ojos ven pero que el cerebro no puede procesar con palabras.. o tiene que ser uno García Márquez para describir paisajes y experiencias tan hermosamente indescriptibles.

El jueves a eso de las 10:30 pm nos embarcamos los 43 integrantes del tour, todos estudiantes de intercambio y nuestra líder de grupo, una finlandesa, en el verdadero expreso polar... bueno, lo de expreso es un decir porque fueron 12 horas hasta Rovaniemi, la ciudad más al norte del país a la que se puede llegar en tren. Afortunadamente teníamos cabina en el tren y aunque estaba pequeña, incomoda y demás, algo pudimos dormir. Llegamos a Rovaniemi a las 11 am y ahí nos estaba esperando el bus que nos llevaría a nuestro destino final, un lugar llamado Korvalan.

Fue mas o menos una hora de camino y a los 20 minutos de Rovaniemi, el conductor del bus nos informó que estabamos aproximandonos al límite del trópico de cáncer y entraríamos al círculo polar ártico... Fue fácil identificar el momento porque la carretera esta señalizada con un Santa Claus que va indicando faltan 20Km, 10Km, 5Km y así para el círculo polar ártico... y en el cruce de la línea hay unas estructuras metálicas en forma triangular que hacen que uno se sienta entrando a otra dimensión... tal vez si lo es: la dimensión del frío perpetuo!

Hasta ese momento del viaje, en realidad no tenía muy claro a donde era que ibamos, si un pueblito, un lugar en la mitad de la nada, un rancho, finca, etc. Sólo sabía que era a "Laponia" pero ese término define un territorio bastante extenso. De repente llegamos y el lugar estaba hermoso, una mezcla de algo en la mitad de la nada con una super finca de descanso, con lago, bosque, etc. Nos dio la bienvenida la dueña del lugar y nos contó un poco precisamente de la historia del lugar dónde estabamos. Básicamente, la zona de Laponia se empezó a explotar turísticamente hace muchos años por los mismos habitantes de la zona, que obviamente, no son muchos. Las familias tienen terrenos enormes y cada área es denominada de acuerdo al apellido de la familia que lo habita. Korvalan no es la excepción, ha sido por generaciones el terreno de esa familia y entre ellos mismos construyeron cada una de las cabañas que rentan durante todo el año.

A cada "cottage", cabañita, le caben máximo 5 personas. Mi grupo fue Clara, Adriana, Su y Roland. Son pequeñas pero acogedoras, obviamente con buena calefacción, equipadas para cocinar un poquito, con secador de ropa en la entrada, etc. Además de las cabañitas está la casa de los dueños, la de los abuelos (que ya no viven ahí), el restaurante, el sauna, el almacén, la bodega de equipo de invierno y otras dos bodegas para maquinaria y herramienta.

La primera actividad de la tarde fue el safari con renos...! Estos animalitos son muy tiernos...! En teoría no son salvajes, pero con semejantes cuernos uno no se atreve a acercarse demasiado no vaya a ser que uno no les caiga bien... Todos los renos en laponia andan en libertad pero tienen dueño. En fin, la parte emocionante, además de tenerlos tan cerca, fue montarnos en un trineo, cual Papa Noeles, para que nos dieran una vuelta. Como si fuera poco, lo siguiente en el plan del día era el safari con perros siberianos... wow! cual montaña rusa... los perritos corren y rapidito.. súperrrr chévre! Son súper bonitos los perros y auqnue tienen fama de ser medio salvajones, estos eran retiernos y consentidos... Ya saben que yo no soy la más animalera del mundo, pero renos y huskys son retiernos.

El resto de la tarde del primer día estuvimos explorando el lugar un poco, el área de sauna, el hoyo de agua helada del lago, donde horas más tarde nos iniciaríamos en el "ice swimming" o "nadado en agua helada", jugando como niños a deslizarnos con trineos de plástico en una montañita de nieve... La noche llega allí a las 5 pm por esta época del año y el frío no sólo acosa en la noche con singular alegría, sino que agota muchísimo, así que esperamos dentro de la cabaña la hora de la comida.

Las comidas estaban incluídas como les dije, y estaban deliciosas, todo fue típico y tradicional... el chef es el dueño del lugar! Así que todo queda en familia y creo que cocina con mucha dedicación. El primer día tuvimos albóndigas con puré de papas y bayas de arándano rojo "lingonberries". Debo hacer un paréntesis para decirles que la papa y las bayas, en especial las de arándano rojo, hacen parte de la dieta diaria del finlandés, así que la mitad de los platos típicos las tienen. Les gusta mucho la combinación de las bayas agridulces con las carnes, las sopas, la papa, etc.

Tratamos de hacerle digestión a la comida lo más rápido posible porque nos esperaba una noche de sauna y agua helada! La expectativa de todos era que para muchos sería la iniciación en el ya mencionado ritual de salir del sauna que se encuentra a unos 80° C y meterse en un hoyo de agua que está a no más de 0°C... El hoyo es literalmente un hoyo, una pequeña parte del lago a la que le rompen el hielo para que uno pueda acceder al agua... Debo decirles que puedo volverme adicta a dicha actividad. Se siente increíblemente delicioso!!! La primera salida al agua estuvo muy divertida porque nadie sabía que esperar. La peor parte, más que la metida en el agua, es salir del sauna y recibir el golpe de frío del ambiente, en ese momento unos -17°C... Lo más chistoso estar en vestido/traje de baño en ese contexto, además usando medias/calcetas porque nos recomendaron usarlas para no pisar directamente la nieve o el hielo. Después de sumerguirse en el agua (hasta el cuello porque no se debe sumergir la cabeza en el agua helada) uno sale del agua y queda como anestesiado, se siente hasta calorcito y todo... Pero el efecto dura un par de segundos, así que antes de que el paro cardiáco-respiratorio ocurra, uno ya está de regreso en el sauna. Jajaja!

El día uno terminó en una pequeña reunión en el área comunal del lugar. Afortunadamente no me quedé con las ganas de tocar una canción porque un niño de Francia llevó la guitarra de paseo, así que a la luz de la chimenea, sonó "Agua Caliente" en el Polo Norte.


Algunos videítos: