Hey! Se nota que he perdido audiencia entre mis blog leyentes porque van como dos semanas que no escribo nada y no se han oído reclamos ni protestas como en anteriores ocasiones.. Pero bueno... no importa, aquí sigo! Y todavía faltan 100 días!! Los cuento tanto para disfrutarlos como para saber cuánto falta para regresar... No se crean, uno pasea, la pasa bueno, disfruta, conoce, pero... como nada en la vida es completo, dirían por ahí, ya ha llegado el punto en el que la "extrañazón" (me acabo de inventar la palabra) empiece a hacer que uno cuente cuanto falta.
Además, esta cultura es tan fría, es decir, la gente es tan fría, que como ni se saludan de beso en la mejilla, extraña uno hasta el contacto físico con la gente... un abrazo, con suerte uno consigue un apretón de manos.. jaja qué curioso.. y pensar, ahora recuerdo, que cuando llegué a México la primera vez de intercambio, me pareció chistoso que todo el mundo repartiera besos a diestra y siniestra... incluso si no lo conocían muy bien a uno, pero uno era el -amigo del amigo-, saludaban de beso... en fin, tal vez esta es una buena introducción para algo de lo que había querido escribir hace tiempo... el llamado -choque cultural- mis impresiones sobre este tiempo aquí en Finlandia en temas tan comunes y cotidianos como la gente, la comida, la calle, etc.: cuando cumplí un mes de estar aquí, dije: escribiré el balance del primer mes... pero no tuve tiempo.. después al segundo lo mismo y tampoco se pudo... y como para cuando cumpla el 3er mes de estar aquí andaré haciendo maleta de nuevo para irme de vaga a Rusia, pues mejor decidí hacerlo ahora...
De todas maneras, es algo que se irá cosntruyendo, según dicen, aquí la gente cambia conforme cambia el clima, y con ello cambia todo... así que podríamos decir que estas son las impresiones del invierno finlandés.. aún no llega la primavera, todavía ni se asoma, pero si nos apegamos al calendario, ya debería estar aquí.
La gente:No quisiera volver "mis impresiones" en una especie de crítica o queja, no quisiera que suenen así, pero, con algunas excepciones cabe aclarar, he de decir que la gente me ha parecido tosca, ruda, demasiado seria para mi gusto, hacen honor a lo frío de su clima aunque no a lo húmedo porque son secos.. Son alcoholicosssss, rerumberos, hablan muy duro, super deportistas, fashion -casi todo el mundo se viste muy bien, aunque sobretodo los jóvenes más que la gente mayor-, tienen unos metabolismos hiperdesarrollados porque se ven muy bien para la cantidad de pan y chocolates que comen... Por lo general responden con cordialidad cuando uno pregunta algo en la calle o solicita algún favor, pero definitivamente, no tienen vocación de servicio... Por lo mismo muchas cosas aquí son autoservicio, pero siempre hay alguien que tiene que cobrar, limpia, conduce, recoge, etc., si de alguna manera atienden, son bastante apáticos. Son cerrados, demasiado estructurados, pero repito, esto es una simple percepción y no trato de generalizar...
Claro, también es diciente el hecho de que en 2 meses y medio sólo haya conocido a unos 5 finlandeses aproximadamente... la mayoría de gente con la que ando es también extranjera, porque aquí los locales no más no se dejan, son difíciles de conquistar yo creo. Haciendo una comparación, cuando fui de intercambio a México, sólo conocí mexicanos, aquí, casi sólo conozco extranjeros y pocos finlandeses... Además nosotros somos el tipo de gente que conoce a alguien y más si es extranjero, como que lo acoge, lo adopta como amigo así sea temporal... Aquí, al contrario, creo que la gente piensa que como uno es "temporal" no va a pasar el tiempo suficiente para que lo puedan catalogar a uno como amigo, y en esa medida, las relaciones son distantes. Claro, una vez más, no todos!!! Hay gente más abierta que otras, pero son -la excepción-.
Hay dos cosas que no puedo evitar mencionar y tal vez si suenen a queja, pero me desahogaré con el blog porque no hay de otra. Lo primero es que son unos groseros en la calle, en la rumba, en cualquier parte, a la hora de caminar... simplemente no se fijan por donde caminan ni a quien se lleven por delante, codeen, pisen, etc. Todo el mundo trata de caminar rápido por el frío que hace, pero son un peligro andante. Con sus tamaños, uno es un pobre enano latino y se lo llevan por delante, por el lado o por donde sea. Las primeras veces que me pasó que me pegaran en la calle me volteé esperando ilusamente un "anteski" o sea, un "perdón/disculpe".. para la veinteaba vez obviamente ya ni intentaba voltear porque es caso perdido. No sé si les parece normal, o simplemente es parte de su naturaleza el no pedir disculpas. Y eso que hay que agradecer que la palabra "disculpe/perdón" sí esté en su diccionario, porque la palabra "por favor" ni siquiera existe en el idioma finés, y se nota...! Me imagino que sentirían que se rebajan pidiendo un favor...
Por otro lado, yo se que no tengo ni una pestaña de finlandesa, pero la segunda cosa que definitivamente no soporto ya, es que de repente lo miran a uno de arriba a abajo con una actitud absolutamente indescifrable, porque son personas completamente inexpresivas y es imposible diferenciar una mirada de -que linda niña-, a una de -esta que hace aquí en mi país-, a otra de -esta tonta no sabe como usar esa máquina-, a un infinito etc. Nada, pero lo cierto es que lo miran a uno como bicho raro y sin saber por qué razón será. Esto es obvio algo que nos pasa a las latinas (lo he comentado con compañeras mexicanas y tienen la misma percepción), y de parte de hombres y mujeres finlandesas por igual.
Otra cosa super curiosa es el respeto que le tienen a los hombrecitos verdes de los semáforos peatonales. Oscar podrá corroborar que no miento cuando digo que yo soy de las que se va hasta el semáforo en una calle para cruzarla por la cebra cuando se de luz verde al paso peatonal. Pero buenoooo... hay sus excepciones! Una de esas en mi cabeza es que no venga ningún carro y la temperatura marque unos -10 grados! Por supuesto pasaría la calle si ese fuera el caso... Pero aquí, la gente se lo toma muchooo más en serio, y hay de que uno se cruce cuando el hombrecito rojo está indicando lo contrario! Es como casiiii un sacrilegio.... aún cuando no vengan carros y la temperatura esté de muerte, todos esperan a que se de la señal... Ah! Y cabe aclarar que en Helsinki es más común que NO venga un carro en la calle a que Sí venga... como quien dice, las calles casi siempre están medio vacías, sólo las vías principales tienen alguna circulación. Lo peooooor, es que no sé porque extraña razón el famoso hombrecito verde aparece en el semáforo peatonal como unos 8 segundos después de que el semáforo vehicular se ha puesto en rojo... Y esos 8 seg. son una eternidad, porque ya los carros están parados si es que hay, y nadie pasaaaaaaaa!

Como les dije al principio, estas son las impresiones de invierno.. porque dicen las buenas lenguas, que a medida que pase el frío, pasará también la inexpresiva cara de los finlandeses... se volverán más amables, más alegres.. Hasta cierto punto uno los entiende y trata de excusarlos, finlamente, aquí hace un frío que lo puede llegar a poner de malas a uno por toda una estación del año y más si no hay más remedio que vivirla cada tanto!